Las autoridades colombianas confirmaron hoy la muerte de cuatro personas en un enfrentamiento entre disidentes de las FARC y guerrilleros del ELN ocurrido hace dos días en el departamento de Nariño, en el suroeste del país.

"Se han encontrado cuatro cuerpos, los cuales estaban siendo velados en el sector del río Patía", dijo a periodistas el comandante de la Fuerza de Tarea Pegaso del Ejército, brigadier general Sergio Tafur.

El alto oficial no confirmó quiénes se enfrentaron, pero explicó que en el caserío Pueblo Nuevo hay presencia del ELN y de disidencias de las FARC.

Según denuncias de la comunidad, hacia las 17.30 hora local de lunes (22.30 GMT) disidentes de las FARC festejaban un cumpleaños en Pueblo Nuevo, caserío del municipio de Magüí Payán, cuando fueron atacados por guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

"Alrededor del caserío se encontraron unos vestigios de unas detonaciones sobre la playa del río Patía e igualmente en un bolso se hallaron dos granadas de fragmentación y un cuarto pentonita, los cuales fueron destruidos por los expertos en explosivos que llevamos a la operación", agregó Tafur.

El comandante de la Fuerza de Tarea Pegaso aseguró también que una persona herida llegó al municipio de Tumaco, proveniente de Pueblo Nuevo, y está recibiendo atención médica.

"Estamos en labores de inteligencia de combate y en labores investigativas, por parte del la Fiscalía, con el fin de determinar si se presenta en algún otro sector presencia de cuerpos sin vida como producto de esta confrontación entre estos dos grupos armados", añadió el militar.

En noviembre del año pasado, el Gobierno nacional y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) firmaron un acuerdo de paz para terminar 52 años de conflicto.

Sin embargo, hoy en todo el país se contabilizan 15 grupos de desertores que suman cerca de 700 guerrilleros, de acuerdo con un informe divulgado la semana anterior por la Fundación Paz y Reconciliación.

Por su parte, el Gobierno de Colombia y el ELN abrieron el pasado 7 de febrero en Quito un proceso de diálogo encaminado a terminar con el enfrentamiento que han mantenido durante más de 52 años.

La disputa entre los disidentes y el ELN tiene como objetivo quedarse con el control de las zonas en donde antes operaban las FARC, ahora convertidas en partido político. 

EFE